La Consejería de Asuntos Sociales costeará un abogado para las familias a las que se les retiren niños por desamparo, maltrato o cualquier causa, según anunció ayer su titular, Isaías Pérez Saldaña, quien advirtió, no obstante, de que "morirá con las botas puestas" por hacer prevalecer los derechos del niño. El consejero dijo que esta medida obedece a que algunas familias a las que se les han retirado niños no acuden ni a los requerimientos judiciales de personación y que con el abogado quedará constancia de que se cumplen todas las garantías.Sobre la protesta de 12 familias a las puertas de su consejería para que les devuelvan los niños que les fueron retirados y entregados en adopción, Pérez Saldaña dijo que estos expedientes se han estudiado uno a uno, que en todos los casos estaba justificada la retirada.
También advirtió el consejero de que, en relación con alguna denuncia, si en algún centro de menores se les ha dicho a los niños que sus madres biológicas han muerto sin ser cierto y el hecho se comprueba se le cortará de inmediato el concierto que tenga con la consejería "aunque sean monjas", si bien destacó la labor de las religiosas en estas tareas.
También insistió en que lo prioritario son los derechos del niño, que el más humano de los derechos es el del menor y que un pequeño no puede esperar indefinidamente en una institución a ver si sus progenitores se reinsertan socialmente, porque, en su opinión, esto supondría volver al siglo XIX.
El consejero presentó una campaña publicitaria contra el maltrato y en favor de los derechos del niño que cuenta con un anuncio en televisión.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 18 de noviembre de 2000