Bajo el nombre de Crematorio solar: la vida muere al revés, los músicos Enrique Santos y Miguel Molloy han creado un espectáculo sensorial que se representa hoy en el teatro de las Aguas. Les ayudan en el montaje siete actores, que comienzan su interpretación en la propia puerta de entrada al recinto. "Allí vendan los ojos al público y le guían hasta las butacas, le despistan un poco", comenta Santos. Mediante un juego de olores y caricias, los espectadores se van adentrando en la función, donde la música es el eje central. "Está procesada y pasada al revés", añade el músico. Una vez destapados los ojos, los asistentes presencian un número coreográfico. "Es todo muy sensorial; representa el momento actual de nuestra sociedad: el contraste entre el terror y el amor, la angustia y la serenidad, la vida y la muerte", según Santos.
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Crematorio solar... Hoy, 22.30, en el teatro de las Aguas (calle de las Aguas, 8; metro Latina). 1.000 pesetas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 18 de noviembre de 2000