Ni siquiera el terremoto de las vacas locas ha conmovido a los finlandeses tanto como el anuncio de la ex Miss Finlandia Lola Odusoga de injertarse un centímetro de silicona en sus pechos. Lola, como se la conoce en el país, fue la primera belleza no rubia que conquistó, en 1996, el cetro. De padre nigeriano y madre finlandesa, la joven ha estado desde entonces en primera plana de la actividad del país, como presentadora de televisión y como apetecida modelo. En el mismo año, en el concurso de Miss Universo, celebrado en Las Vegas, obtuvo un meritorio tercer lugar. La gran polémica saltó cuando Lola, de 23 años, defendió en un programa televisado de gran audiencia el injerto, pues según ella "será de gran utilidad en mi carrera como modelo". Los medios de comunicación se han hecho eco de la polémica. Tanto los periódicos vespertinos de gran tirada como los semanarios de interés general han dedicado a la polémica innumerables páginas. Según las encuestas de opinión, los finlandeses están divididos por la mitad: el 50% aprueba de decisión y el otro 50% la condena como inmoral. La preocupación ha llegado hasta el Parlamento, después que jóvenes escolares han tomado parte en el debate. Algunos legisladores se han sorprendido de que la ley no penaliza la cirugía plástica de las menores de edad.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 1 de diciembre de 2000