Jordi Vilaró, de 35 años, es el cuarto hombre del G-4 y el entrenador de Félix Mantilla. Nunca jugó en el circuito profesional, pero desde muy joven se dedicó a la enseñanza del tenis.Pregunta. ¿Cuándo y dónde comenzó a jugar al tenis?
Respuesta. A los ocho años. En el club Sant Gervasi, de Barcelona, con mis padres, que eran socios.
P. ¿En qué torneo ganó la primera peseta?
R. Como jugador, no conseguí grandes éxitos. Mi carrera se reduce a competiciones y torneos comarcales y regionales. Nunca fui profesional. Gané una vez, en Castelldefels, pero eran muy pocas pesetas.
P. ¿Recuerda su debú en la Copa Davis con el G-4?
R. Ilusión y nervios. La anécdota fue que no pude estar en la pista con los demás porque me hallaba en Dubai, en un torneo que jugaba Félix Mantilla. De todos modos, seguí la eliminatoria por Internet y por teléfono.
P. ¿El mejor tenista de todos los tiempos?
R. Pete Sampras.
P. ¿Y español?
R. Manolo Santana y Sergi Bruguera.
P. ¿El último artista de la raqueta?
R. John McEnroe.
P. ¿Qué momento de su vida recuerda de modo especial?
R. El nacimiento de mi hijo, Alan, el pasado año.
P. ¿El rival más complicado para Mantilla?
R. Patrick Rafter y Carles Moyà.
P. ¿Otras aficiones?
R. Me relajo con la música española, pero especialmente, en mi tiempo de ocio, soy un entusiasta del cine independiente, de las películas en las salas pequeñas, a las que la gente va a ver historias interesantes. Una de mis películas favoritas es la argentina Un lugar en el mundo. ¡Ah!, soy un seguidor del actor catalán Sergi López, recientemente nombrado el mejor europeo. Es curioso, Sergi es más conocido en Francia que en Cataluña.
P. ¿A qué personajes universales admira?
R. A Gandhi. Su filosofía se echa en falta en el mundo actual.
P. ¿Cuál es la afición que entiende más de tenis?
R. La de Barcelona.
P. ¿Le interesa la política?
R. Como ciudadano, me interesa.
P. ¿Por qué?
R. Porque no puedes esconder la cabeza ante situaciones sociales concretas.
P. ¿Cuál es el objeto más íntimo de su equipaje?
R. Una agenda en la que escribo mis pensamientos y sensaciones de la jornada.
P. ¿Vino o cava?
R. Vino.
P. ¿Qué libro está leyendo durante la Copa Davis?
R. No he tenido tiempo para la lectura.
P. ¿Un lugar en el mundo para vivir?
R. La comarca del Ampurdà, en Girona.
P. ¿Con quién y cómo celebrará la conquista de la Ensaladera?
R. Pasando 48 horas con mi mujer y mi hijo en el Ampurdà, sin ruido ni nada que hacer, al lado de una buena chimenea.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 11 de diciembre de 2000