Abuy Nfubea, portavoz de la Plataforma Paso de Cebra, que integra a una treintena de asociaciones, ha denunciado que los inmigrantes que utilizan las líneas de la empresa Almeraya, que cubre el trayecto entre Almería y Madrid, son tratados de forma discriminatoria desde hace un año. Abuy Nfubea afirmó: 'Esa empresa sitúa a sus viajeros dentro del autobús en función de su procedencia. Si se trata de personas negras o magrebíes, se les sienta siempre en la parte de atrás del autobús y, cuando vas a comprar el billete, siempre te dan los últimos asientos'.
Esta denuncia fue respaldada por Argentina Riquelme, una española que realizó el trayecto Madrid-Almería el pasado 1 de enero. Riquelme explicó: 'Compré el billete en Madrid, en la estación de Méndez Álvaro, 10 minutos antes de que partiera el autobús de las tres de la tarde para Almería. Ese día salían dos coches y todos los viajeros eran negros, menos cuatro personas blancas que habíamos comprado el billete en el último momento. En Bailén, después de una parada en la que se juntan los cuatro autobuses que hacen la ruta, nos metieron a todos los blancos en el mismo coche y a los negros en otro'.
La empresa rechazó rotundamente las acusaciones. 'No tenemos constancia en absoluto de que esto pase. Además, sería totalmente absurdo porque la mayoría de nuestros viajeros son inmigrantes y eso supondría tirar piedras contra nuestro tejado, contra nuestros clientes', afirmó un responsable de Almeraya.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 9 de enero de 2001