El etarra José Luis Barrios Martín, que se enfrenta a una condena de 227 años de cárcel por el atentado, en 1997, contra una furgoneta de la base aérea de La Armilla (Granada) en el que murió un peluquero, se negó ayer a estar presente en su juicio porque, según dijo al tribunal, 'se trata de una farsa'. La Audiencia Nacional comenzó a juzgar a Barrios por la acción perpetrada por el comando Andalucía de ETA contra la furgoneta de la base aérea en la que viajaba personal civil y militar. A consecuencia de la explosión falleció Domingo Puente Martín, de 52 años, de profesión peluquero, y otras 17 personas resultaron heridas de diversa consideración. Barrios manifestó que no quería permanecer en el juicio porque 'es una farsa' y porque 'ustedes -dijo señalando a los jueces- no tienen derecho a juzgarme'. Ante su actitud, los miembros del tribunal decidieron la expulsión del etarra y que no fuera conducido a la Audiencia en las próximas sesiones, tal y como solicitó Barrios antes de marcharse. Según el fiscal, Barrios formaba parte del comando Andalucía cuando a las 7.10 del 10 de febrero de 1997 hizo estallar un coche bomba al paso de una furgoneta del Ejército. El fiscal le imputa un delito de asesinato terrorista, 13 de asesinato en grado de tentativa, un delito de estragos, uno de robo con finalidad terrorista y otro de falsedad documental.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 9 de enero de 2001