Definitivamente, el alcalde de Marbella, Jesús Gil, se sentará en el banquillo para ser juzgado por un delito urbanístico, después de que la titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Marbella, María Luisa de la Hera, haya ordenado la apertura de juicio oral por el caso del edificio de la familia del periodista fallecido Antonio Herrero. Además de Gil, la acusación por supuesto delito contra la ordenación del territo afecta a otras 10 personas -ocho concejales, el gerente de Urbanismo, Juan Antonio Roca, y el abogado José Luis Sierra-.
Los ediles aprobaron en una comisión de gobierno la concesión de una licencia de obras al periodista radiofónico para la construcción de un edificio en zona verde y viales públicos, según la acusación particular que ejerce el Partido Socialista, 'a sabiendas de su ilegalidad'.
La portavoz municipal socialista, Isabel García Marcos, insistió ayer en que la licencia 'infringió todos los principios elementales de legalidad' y se aprobó 'pese a contar con los informes contrarios de los técnicos municipales'.
La Fiscalía pide en este procedimiento 18 meses de prisión y ocho años de inhabilitación para Jesús Gil, en tanto que el PSOE solicita a su vez seis meses de prisión y 10 años de inhabilitación para todos los encausados.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 10 de enero de 2001