Francisco Grosso Utrera, de 48 años, ha sido encontrado muerto en su vivienda en Vejer de la Frontera (Cádiz), según las primeras observaciones de la Policía Judicial, a causa de la inhalación de monóxido de carbono procedente de la combustión de gas butano. La Guardia Civil encontró al hombre tendido en el suelo y muerto en la sala donde está un termo calentador de agua, cuyo mal funcionamiento se baraja como causa de la acumulación del monóxido de carbono.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 12 de enero de 2001