La compañía Telefónica decidió suspender sine die la anunciada bajada de tarifas desde un teléfono fijo a uno móvil, que tenía previsto aplicar desde ayer, por desavenencias con la Comisión Nacional del Mercado de las Telecomunicaciones (CNMT). La rebaja propuesta por la operadora (8,84%) no incluía las llamadas dirigidas a usuarios de Amena, por lo que no contaba con el visto bueno de la CNMT.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 16 de enero de 2001