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La patronal Copyme también se descuelga de la huelga contra la ampliación de horarios comerciales

La anunciada huelga del pequeño y mediano comercio madrileño contra la ampliación de horarios comerciales decretada por el Gobierno regional pierde cada vez más actores. Si el pasado viernes se descolgaron los sindicatos UGT y CC OO tras largas horas de negociación con el consejero de Economía, Luis Blázquez, el turno de ayer fue para la Confederación General de la Pequeña y Mediana Empresa (Copyme).

El decreto de Economía permite que los establecimientos comerciales abran sus puertas todos los domingos de agosto. Así, se amplía de 14 a 18 el número de festivos laborables al año para el sector. La patronal Copyme fue una de las que con más fuerza atacó la iniciativa de Blázquez. Sin embargo, ayer decidió conceder una 'oportunidad' al Gobierno regional para, según dijo su portavoz, Salvador Bellido, 'ver si es posible dinamizar el comercio en agosto'. Bellido aseguró que Copyme sigue en contra de abrir todos los domingos de ese mes, pero, aun así, se descuelga de la huelga, prevista para el próximo lunes.

Blázquez se comprometió a presentar a la patronal el borrador de su llamado plan de 'dinamización de agosto' antes del próximo 12 de febrero. El presupuesto inicial para el plan es de 1.000 millones de pesetas, según anunció el consejero. Blázquez también se reunió ayer con representantes de la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados (Asedas). Tras la cita, esta organización, que representa a unos 30.000 empleados en Madrid, decidirá mañana si se suma o no a la huelga. En su último intento por echar atrás la protesta de los comerciantes, el consejero también se reunirá hoy con la Asociación Madrileña de Empresarios Minoristas de Alimentacion, La Única.

En su intervención de ayer, el consejero restó importancia al hecho de que la patronal Cecoma mantenga firme su decisión de cierre. El presidente de esta asociación, Salvador Santos Campano, aseguró que la deserción tanto de los sindicatos como de Copyme no afecta en nada al cierre previsto. 'No tenemos ninguna preocupación. Copyme realmente no aportaba mucho. Además, nosotros representamos casi al 80% de los comercios madrileños', señaló.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 17 de enero de 2001