Las alegaciones que presentaron asociaciones de padres, sindicatos y oposición al Consejo Escolar Municipal de Alicante fueron encaminadas en un mismo sentido: 'frenar el deterioro de la enseñanza pública'. Según la propuesta que se debatió anoche, Educación pretendía para el próximo curso cerrar varias unidades de educación primaria en centros públicos de Alicante para fomentar a centros privados concertados. 'A la enseñanza pública no hay que matarla, basta con dejarla morir', lamentó Miguel Asensio de la FETE-UGT.
Sindicatos y padres criticaron la 'defunción anticipada' del colegio Benalúa, en el que está previsto que se supriman tres unidades de Primaria y una de Infantil. En situación similar se encuentran los colegios Enric Valor y La Aneja que han perdido alumnos durante este curso por la falta de inversión pública.
El PSPV, según indicó la edil, Carmen Sánchez Brufal considera necesaria una 'efectiva' coordinación entre los centros públicos para evitar que los padres escojan matricular a sus hijos en la privada. Las APA lamentaron el retraso de las construcción de centros escolares en la ciudad de Alicante donde son 'urgentes y necesarios' al menos tres centros de secundaria. También alertaron de la 'privatización' encubierta del sistema de educación pública; ya que en la enseñanza infantil 'todo son facilidades en la privada y problemas en la pública', indicaron. La administración se limitió a decir que 'estudiaremos la propuesta'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 18 de enero de 2001