El equipo de gobierno municipal sacó ayer adelante, con los votos en contra del PSPV y del Bloc, el presupuesto del Ayuntamiento de Castellón para 2001 que asciende a más de 17.000 millones de pesetas. Pese a que el incremento de los ingresos directos, es decir de la carga impositiva, experimenta un fuerte crecimiento, el Consistorio precisará de un préstamo de más de 2.000 millones de pesetas para sacar adelante la mayoría de las inversiones previstas. Este préstamo está supeditado, sin embargo, a la autorización del Ministerio de Hacienda. Además, el montante que el municipio recibirá de la Generalitat Valenciana es un 300% inferior al del ejercicio anterior, hecho fuertemente criticado por la oposición.
El grupo municipal socialista, a través de su portavoz, Ignacio Subías, presentó una enmienda a la totalidad y 71 enmiendas parciales, de las que no prosperó ninguna y sobre las que se abstuvo el edil del Bloc, Antoni Porcar, que no presentó ninguna. Por su parte, el concejal de Hacienda, Nicolás Martínez, basó su defensa de los presupuestos en el pasado y en una avalancha de cifras. Ignacio Subías criticó no sólo el incremento de la carga impositiva, sino el incremento de la deuda, que supone más del 75% de los presupuestos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 19 de enero de 2001