La investigación sobre el llamado síndrome de los Balcanes exige máxima apertura y transparencia, señalaron ayer los ministros de Asuntos Exteriores de UE, que incluyeron el tema de la munición con uranio empobrecido en la agenda de su reunión mensual celebrada en Bruselas. 'Es un asunto serio y hay que trabajar con la máxima transparencia', afirmó la sueca Anna Lindh, en nombre de la presidencia.
Los Quince hicieron un examen general del problema, pero no abordaron directamente el último dato conocido en la polémica, la presencia de vestigios de plutonio y uranio 236 en este tipo de proyectiles utilizados durante las misiones de la OTAN en Bosnia y Kosovo y anteriormente en la guerra del Golfo.
Lindh declaró: 'Habrá que esperar antes de tomar una decisión más en firme a las conclusiones de las investigaciones en curso'. Se espera que los resultados de las pesquisas de la Alianza Atlántica y del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente sean conocidos dentro de un mes.
Por su parte, el ministro español de Exteriores, Josep Piqué, fue bastante explícito: 'Por el momento no hay ninguna evidencia científica de causa y efecto' sobre los casos de cáncer en soldados europeos que combatieron en los Balcanes con el empleo de esta munición. 'Pero hemos pedido a la Alianza que haya un nivel altísimo de transparencia en la investigación', dijo Piqué. 'La OTAN debe canalizar toda la información', agregó el ministro, que, a su juicio, 'una intervención de la UE implicaría una duplicidad y una mayor confusión'. El Gobierno español pidió el pasado jueves al secretario general de la OTAN, George Robertson, la máxima información sobre la presencia de plutonio en los proyectiles fabricados con uranio empobrecido.
Por otra parte, los Quince anunciaron ayer que la actual troika comunitaria (la ministra Lindh, el alto representante, Javier Solana, y el comisario de Relaciones Exteriores, Chris Patten), viajará a principios del mes próximo a Yugoslavia y Bosnia.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 23 de enero de 2001