En el día 9 de enero, su periódico publica una carta en la que habla del caos del servicio de urgencias.
La mala praxis nunca tiene justificación; sin embargo, sí se pueden aclarar algunas de las quejas expuestas por don Manuel Olmo:
El Hospital Universitario La Paz es un gran centro en cuyas urgencias se atiende diariamente a cerca de 1.000 personas.
Sus profesionales siempre tratan de atender lo mejor posible a pacientes y familiares, aunque en determinados momentos la situación propia de la urgencia hace que esto no sea siempre así.
El hospital se encuentra en pleno proceso de reforma de sus instalaciones.
Las obras siempre suponen un perjuicio para los usuarios, pero no se puede olvidar que éstas se llevan a cabo con un fin muy claro: adecuar las instalaciones a las necesidades actuales e incrementar la calidad de la atención y de los servicios que el hospital ofrece a la sociedad.
En este sentido, hay que decir que el paciente al que se refiere la carta estuvo en el hospital el 11 de diciembre. El 21 de diciembre se inauguró parte de la obra nueva de urgencias, realizada precisamente para paliar algunas deficiencias existentes.
Así, se ha hecho una nueva sala de espera para pacientes, se han abierto cinco nuevas consultas y se han habilitado dos consultas filtro para hacer el triaje de forma que cualquier paciente sea visto por un médico nada más acceder a urgencias. Además de otras mejoras que están en marcha, también se ha licitado la obra para la instalación de una unidad completa de radiología en urgencias con el fin de reducir la demora en la realización de estas pruebas.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 23 de enero de 2001