Agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil detuvieron el pasado fin de semana a ocho personas presuntamente relacionadas con una red dedicada al tráfico ilegal de obras de arte y joyas.
De los ocho detenidos, cuatro parecen estar directamente implicados en el tráfico de obras de arte, otros dos son delincuentes buscados por la policía y que ya han ingresado en prisión, y de los otros dos restantes nada se sabe.
De los cuatro detenidos a los que supuestamente se implica en una red que opera en varias provincias españolas, tres son de la misma familia y el cuarto es un conocido abogado de la localidad de Xàtiva.
Tanto el letrado como los otros tres tienen antecedentes delictivos relacionados con la actividad por la que fueron detenidos el pasado fin de semana.
Todos los implicados fueron puestos a disposición de un juzgado del municipio de Sueca y posteriormente puestos en libertad con la obligación de presentarse ante un juez los días 1 y 15 de cada mes, excepto los que ingresaron inmediatamente en la cárcel de Picassent.
La operación de la Guardia Civil se inició hace cinco meses tras la denuncia de un robo de joyas que alcanzaba los ocho millones de pesetas.
En las viviendas de los implicados, la Guardia Civil de incautó de numerosas obras de arte 'de gran valor histórico del patrimonio artístico', aseguró ayer Carmen Mas, delegada del Gobierno en Valencia. Mas no precisó ni el número de obras ni su valor ya que está pendiente su peritación.
Las obras halladas parece que podrían ser las mismas robadas hace algunos meses en un museo de Montpelier y en otros puntos del sur de Francia. Sobre este particular, Mas aseguró que 'tras la peritación el juez decidirá qué debe hacerse con ellas, imagino que devolverlas al lugar de origen'.
La operación sigue abierta en otras provincias españolas y, según Mas, no se descartan nuevas detenciones.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 24 de enero de 2001