España se entrenó con intensidad variable frente a EE.UU, un equipo muy endeble cuya principal aportación al balonmano es el uso masivo de protectores bucales. Dominados por la abulia en la primera parte (19-10), los españoles reaccionaron después, pero la diferencia final (45-18) fue inferior a la conseguida por Alemania (40-12) y Croacia (41-12) frente a EE UU. Tras el descanso de hoy, España disputará mañana el primer partido difícil, frente a Alemania.
El equipo actual de EE UU militaría en la primera regional española o cuarta división nacional. No hay vestigios del excelente trabajo que realizó en ese país el español Javier García Cuesta (hoy seleccionador de Portugal) entre 1980 y 1986. Como botón de muestra, España tuvo que emplearse a fondo en los Juegos de Los Ángeles (1984) para imponerse por sólo tres goles.
ESPAÑA 45|EEUU 18
España: Martínez; Ugalde (3), Lozano (4), Duishebáiev (5), Masip (9, 5 p.), Hernández (5, 1 p.) y Colón (5); Davis (1), Olalla (5), Raúl (3), Ortega (5, 2 p.), y Barrufet. EE UU: Zanzi; Brennan, Tenney, Vernon, Morrow, Heath (6) y Salam (1); T. Fitzgerald (3), J. Fitzgerald (4), Lamour (2), Dunn (2) y Thompson. Árbitros: Hussain y Haider (Kuwait).
Aparte del prurito profesional, no era fácil motivar ayer a los españoles: es muy improbable que haya que recurrir a la diferencia general de goles para deshacer eventuales empates a puntos. España tiene asegurada la tercera plaza del grupo, y se clasifican cuatro.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 26 de enero de 2001