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LA OFENSIVA TERRORISTA

La central ELA deja sola a LAB por no poner un crespón negro en una marcha

El sindicato nacionalista ELA, que mantiene su unidad de acción con la central radical abertzale LAB, abandonó ayer una manifestación por la negociación colectiva convocada por ambas organizaciones. Los cerca de 2.000 delegados que aportaba el sindicato que lidera José Elorrieta, llegados en autobuses de toda la geografía vasca, recibieron la orden de retirarse de la marcha cuando ésta iba a arrancar desde el parque del Arenal de Bilbao. La ruptura se originó tras el atentado que ayer costó la vida al cocinero Ramón Díaz. Elorrieta intentó sin éxito que el secretario general de LAB, Rafael Díez Usabiaga, aceptara colocar un crespón negro en la pancarta, en homenaje al asesinado, afiliado a Comisiones Obreras, y como muestra de condolencia y solidaridad con su familia y compañeros de militancia.

Tras la negativa de los radicales a realizar ese gesto, responsables territoriales y sectoriales del sindicato nacionalista comunicaron a sus delegados la decisión de no iniciar la marcha conjunta y regresar a los autobuses. El sindicato minoritario ESK realizó el recorrido junto a LAB, aunque poco después manifestó su repulsa por el atentado de San Sebastián.

La central nacionalista vasca, cuya unidad de acción con LAB se ha mantenido por encima de los atentados de ETA y ha corrido pareja con la continuidad en su enfrentamiento con UGT y CC OO, asistirá a la manifestación convocada para hoy por este último sindicato.

Los gestos de repulsa habituales y las concentraciones de condena al asesinato de ETA se reprodujeron ayer en varias ciudades españolas. Hubo concentraciones a las 12.00 a la puerta de la mayoría de los ayuntamientos. Pero el gran acto de repulsa al último asesinato de ETA está convocado para hoy, a las 20.30, en San Sebastián, en los jardines de Alderdi Eder, bajo el lema 'ETA No. Paz y Libertad', que convocan de forma unitaria el Gobierno vasco, la Diputación Foral de Guipúzcoa, el Ayuntamiento donostiarra y el sindicato CC OO.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 27 de enero de 2001