Es un caso antológico del clásico humor negro que aún nos caracteriza: algunos minusválidos, pese a habérseles dicho lo contrario, no pudieron participar en las Jornadas Técnicas sobre Accesibilidad Integral del Ayuntamiento de Madrid... porque todas las plazas de aparcamiento estaban ocupadas por coches oficiales.
Lo cual, a su vez, no es sino un ejemplo sangrante más de lo que está ocurriendo desde hace años: mientras las autoridades van destruyendo las escasas plazas de aparcamiento del centro de Madrid, tienen el valor de ir reservándose cada vez más para sí mismas los poquísimos lugares que quedan. No dejan sitio sino para ellos, y después tienen el descaro de hablar de 'accesibilidad integral' democrática. Ni en tiempos del franquismo se atrevían a estas y otras lindezas antipopulares, antidemocráticas a tope en tantos campos importantes para los ciudadanos, escudándose ahora en que ellos han sido elegidos... Elegidos por maquinarias partidistas que establecen reglas de juego que eliminan de entrada a casi todos los ciudadanos, manipulando la opinión pública, etcétera.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 28 de enero de 2001