Vicente Rambla, consejero de Economía y Hacienda, calienta motores ante la inminente apertura de las negociaciones entre el Estado y las comunidades autónomas para establecer el modelo de financiación autonómica que regirá durante seis años a partir de 2002. Rambla explicó, en declaraciones a Efe, que la Generalitat valenciana apostará por primar la población sobre la extensión territorial a la hora de distribuir fondos del Estado porque los destinatarios de los servicios públicos son los ciudadanos.
El consejero de Hacienda defendió la ampliación del porcentaje de la recaudación del IRPF que deben gestionar los gobiernos regionales por encima del actual 30% 'en razón de las competencias efectivas transferidas'. También abogó por la cesión de los impuestos sobre el consumo, como mejor indicador del dinamismo económico de cada región.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 29 de enero de 2001