El BSCH ha revisado a la baja sus expectativas de beneficio para este año en un 5%, pero sobre unos datos que ya suponían un descenso en el ritmo respecto del ejercicio actual.
El anuncio sorprendió al mercado, que estaba dispuesto a celebrar el cumplimiento de los pronósticos sobre resultados del año 2000, pero ahora hay un abismo entre el 43,36% que han crecido los beneficios en ese año y el 26,42% que se espera suban en 2001, una vez rectificadas las previsiones. La cotización del BSCH cayó el 3,67% y arrastró al conjunto del mercado, sobre todo al BBVA que perdió el 2,19% al esperar los inversores que en breve se produzca un comunicado en la misma línea.
El mercado español reaccionó mal ante una situación que en Estados Unidos viene siendo habitual en las últimas semanas y que fue, precisamente, la que puso en guardia a los inversores respecto del grado de enfriamiento de la economía.
El Ibex 35 perdió el 1,39% y el índice general de la Bolsa de Madrid un 1,24%, convirtiéndose así en los indicadores europeos que tuvieron el comportamiento más negativo en este jornada.
El euro tampoco parece amoldarse bien a la actual coyuntura y, aunque parece descontada una nueva rebaja de los tipos de interés en la zona del dólar, ayer volvía a ceder terreno. La cotización oficial fue de 0,9193 dólares por euro, lo que supone pagar 181 pesetas por cada dólar.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 30 de enero de 2001