El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, afirmó ayer que las declaraciones que efectuó después del último atentado de ETA 'son correctas' y 'no acabarán en manos de los jueces', aunque aseguró que al PP 'le gustaría' sentar en el banquillo de los acusados a algún dirigente del PNV, 'sobre todo desde la pluma de Pedro J. Ramírez y los deseos de Mayor Oreja para acabar en manos de Garzón como la Mesa Nacional de HB'. En una entrevista concedida a Catalunya Ràdio, Arzalluz declaró que 'aquí es muy fácil procesar a alguien'. 'Crean una situación de escándalo cuando quieren porque dominan casi todos los medios y ahora no lo han hecho porque han calculado que era contraproducente para sus intereses', añadió. El líder de los nacionalistas vascos se mostró convencido de que 'si hacen comparecer a un Egibar o a un Arzalluz ante un juez lo convierten en un hombre de verdad y eso no les conviene'.
Arzalluz declaró que a ETA 'se le pueden echar los improperios que uno quiera que le importan muy poco', y quiso dejar claro que 'lo que le puede doler' a la banda terrorista 'es que usted, ante su gente, les pesque en una contradicción'. 'Eso es lo que yo hice, decirles: 'vosotros que decís que estáis luchando contra el poder del Estado y, sin embargo, matáis a un cocinero', añadió.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 31 de enero de 2001