Benedetto Spera, de 60 años, lugarteniente del padrino máximo de la Cosa Nostra, Bernardo Provenzano, fue detenido ayer en un caserío cercano a la localidad de Corleone (Sicilia), cuna de la rama mafiosa de los corleoneses. La Policía de Palermo creyó en un principio que el ocupante de la vivienda era Provenzano, el más misterioso capo de la historia mafiosa, que lleva 37 años en paradero desconocido pese a que las autoridades están seguras de que no ha salido de Sicilia.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 31 de enero de 2001