Contreras, Agostinho, Valcarce, Movilla, Canabal, Contreras, Rojas, Ismael, Edgar y Fernando Sanz. De la portería a la delantera, el Málaga está lleno de jugadores que en el pasado vistieron la camiseta del Madrid. No todos llegaron a debutar con el primer equipo, pero hasta diez de los jugadores del conjunto malacitano se han partido el pecho en la Ciudad Deportiva para jugar con el equipo al que hoy se enfrentan.Muchos esfuerzos, muchas experiencias, que citas como la de hoy devuelven a la memoria, aunque los protagonistas insistan en recordar lo obvio: 'Será especial, pero cuando saltemos al campo dejaremos de lado los sentimientos', dijo ayer Rojas. Para él será tan especial el partido como para Fernando Sanz, que entró en la lista de convocados.
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Indiscutible en las categorías inferiores, el hijo del ex presidente del Madrid se convirtió en la diana perfecta de todas las críticas nada más subir al primer equipo, sobre todo para Capello, que le humilló sin freno. Tras mucho aguantar, con la Copa de Europa en el bolsillo, Fernando Sanz se fue a Málaga a buscar un sitio. Todo iba bien, hasta que las lesiones y la familia, sobre todo ésta última, se han interpuesto de nuevo entre él y el fútbol. La enfermedad de su suegro, Antonio Asensio, se ha convertido en una losa demasiado pesada.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 4 de febrero de 2001