Representantes de las federaciones de Servicios Públicos, Sanidad y Enseñanza de UGT y CCOO rubricaron ayer un protocolo de unidad sindical y trasladaron al consejero de Administración Pública su preocupación por la ausencia de negociación de las retribuciones salariales de este año, que se revisaron al alza en un 2% por imposición del Gobierno central, cuando el IPC llegó al 4% en 2000. Los dos sindicatos de clase también exigieron la aplicación de la sentencia de la Audiencia Nacional que anula la congelación salarial impuesta a los empleados públicos en 1997 y la 'urgente convocatoria' de la mesa general de la Función Pública.
Los dirigentes de las cinco federaciones sindicales auguraron una primavera caliente y anunciaron un calendario de movilizaciones que prevé concentraciones, asambleas y manifestaciones de los empleados públicos desde el próximo martes hasta el 2 de junio.
UGT y CCOO han convocado a las restantes centrales sindicales el próximo lunes para invitar a todos los representantes de los funcionarios a sumarse al acuerdo de unidad de acción.
El STEPV expresó 'su sorpresa' ante el gesto precipitado de las dos centrales de clase y apeló a todos los sindicatos a 'entrar en razón' para sumar esfuerzos en aras de la unidad sindical 'sin exclusiones' en el ámbito de la Función Pública.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 10 de febrero de 2001