De acuerdo a ciertas informaciones transmitidas por los medios de comunicación, la Comunidad de Madrid tiene previsto instalar máquinas expendedoras de preservativos en los institutos de nuestra región, según dicen, para cuidar de los adolescentes, evitando embarazos no deseados y posibles contagios del sida (además de darnos un claro ejemplo de cinismo, nos quieren tomar por tontos).
Esperemos que para una decisión de esta envergadura consulten debidamente a las asociaciones de padres de alumnos y a los consejos escolares, y que éstos colectivos tengan la cordura que no tienen en la Comunidad de Madrid.
Parece mentira, pero nuestros representantes, en lugar de pensar con la cabeza, da la sensación de que piensan con otra cosa.
Como me dijo el otro día una persona: o se ríen de nosotros o tienen acciones en las empresas de preservativos.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 12 de febrero de 2001