Es la primera gran reaparición del año 2001. Antonio Vega, el carismático fundador de Nacha Pop, retoma su carrera como cantante solista. En su nueva compañía discográfica, Chrysalis, publica De un lugar perdido, quinto disco bajo su nombre. Producido por el más devoto de sus muchos admiradores, el guitarrista Nacho Béjar, De un lugar perdido contiene nueve canciones grabadas en Madrid con una banda estelar que incluye a instrumentistas como Gino Pavone, Carlos Raya y Billy Villegas. Una novedad es que Vega ha aceptado colaboraciones externas en las letras: A trabajos forzados lleva un texto del escritor Antonio Gala y otras letras vienen firmadas a medias con Magda del Río.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 20 de febrero de 2001