Aunque estos días se recupera de una bronquitis, Eleuterio Jiménez, vecino de la localidad abulense de La Carrera (300 habitantes), posee una 'extraordinaria memoria', come de todo con un magnífico apetito y está al tanto y 'preocupado' por los temas de actualidad, como los recientes terremotos. Esto no sería importante si no fuera porque este hombre cumplió ayer 108 años, con lo que ha pasado ya tranquilamente por tres siglos. Según su hija mayor, Pilar Jiménez, que cuida de él en el pueblo en el que siempre ha vivido y donde trabajó como agricultor, goza de 'buena salud a pesar de que ahora supera una bronquitis, lo que le hace mantenerse en cama', pero habitualmente le sacan a pasear por las calles de La Carrera y en ocasiones en coche por los pueblos vecinos. Nacido en 1893, se quedó huérfano de padre a los cuatro años y -asegura su hija- 'nadie diría que tiene los años que tiene'. Aunque sufre una sordera pronunciada y va perdiendo visión, 'hasta hace poco veía la televisión y luego me contaba las películas', y hace 12 años le amputaron una pierna por una tromboflebitis; esto no impide para que sea 'feliz y tenga ganas de vivir y seguir con nosotros'. Ayer recibió la visita de amigos, vecinos y niños de la escuela, donde su hija fue maestra, y el domingo celebrará el cumpleaños con sus familiares llegados de fuera. Eleuterio Jiménez tomó el relevo como la persona más longeva de la provincia de Ávila a Lucía Sánchez Arribas, quien falleció a los 109 años el 10 de octubre de 1999.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 21 de febrero de 2001