El fiscal mantuvo ayer la petición de penas que suman 20 años de prisión para una mujer que se anunció como prostituta y un hombre a los que acusa de detener, robar y agredir a un cliente de la procesada en un piso de San Sebastián, donde habían concertado una cita. Las defensas solicitaron la absolución o la eximente de drogadicción.
Durante el juicio, la víctima declaró que, al llegar al piso, le sentaron en un sillón, le amordazaron y, amenazándole con un cuchillo y una jeringuilla con sangre, le robaron 15.000 pesetas y le exigieron las claves de sus tarjetas de crédito. Mientras la chica lograba sacar 75.000 pesetas de un cajero, la víctima se zafó de su agresor y huyó.
Los acusados, que dijeron estar drogados el día de los hechos, mantuvieron versiones contradictorias. La mujer reconoció el robo, pero negó las amenazas. El hombre negó las imputaciones.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 22 de febrero de 2001