Malo, muy malo es decir lo que dijo Rafael Centeno. Peor, haberlo callado durante varios días. Por ambas cosas ha pagado dimitiendo de sus responsabilidades políticas.
Pero mucho peor, infinitamente peor, es pensar y actuar con actitudes xenófobas y en eso tenemos, entre otros muchos ejemplos del Partido Popular, al mismísimo alcalde de El Ejido, que no sé si dice pero sí que hace su política municipal desde su convencimiento profundo de 'los moros a Marruecos'. Y para esa política cuenta con el total respaldo de doña Teófila y demás dirigentes del PP. ¿Hasta cuándo van a seguir teniendo dos escalas de medir estos señores de la derecha andaluza?. -
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 24 de febrero de 2001