El alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano, del PP, explicó ayer por qué, a su juicio, el logotipo diseñado por Mariscal, ganador del concurso convocado por la Fundación Madrid Nuevo Siglo para elegir la marca olímpica del Madrid 2012, no sirve para representar a la ciudad. 'No es expresivo ni representativo de Madrid. No hay una referencia a Madrid. Es un dibujo que igual podría representar a Madrid que a Burgos que a Estocolmo', explicó el regidor.
El diseño de Mariscal es una mancha roja con forma de bandera o antorcha olímpica (véase EL PAÍS de ayer), que, dentro, en letras blancas y números amarillos, reza: 'Madrid 2012'. El miércoles, un jurado compuesto por nueve personas (siete representantes del mundo del diseño y de las artes plásticas más los concejales de Cultura y de Urbanismo) eligió este dibujo entre cinco candidatos, todos salidos de los estudios de cinco premios nacionales de diseño. A pesar de que este dibujo ganó por cinco votos contra cuatro, el Ayuntamiento se niega a aceptarlo como marca olímpica de Madrid a no ser que el diseñador lo modifique.
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El concejal de Urbanismo, Ignacio del Río, señaló ayer que el logotipo ideal debe reunir tres caractirísticas que, según él, ninguno de los cinco diseños contiene: 'Debe englobar un concepto, algo que lo identifique, como en el caso de Sidney era el cuidado del medio ambiente; después, y tal y como ha señalado el alcalde, ha de tener algún elemento con el que el público identifique la ciudad, en este caso Madrid, y tercero, esos dos elementos deben ser muy fácilmente comprensibles por la gente, y esto no lo reunía ninguno de los cinco diseños presentados al concurso', explicó el edil.
Discrepancias
Algunos de los integrantes del jurado manifestaron su discrepancia por la manera de obrar del Ayuntamiento. El pintor Eduardo Arroyo, por ejemplo, decidió incluso renunciar a emitir su voto y se fue ' a ver el partido [del Real Madrid contra el Lazio]' porque consideró 'impresentable' que los representantes del Ayuntamiento avisaran, antes de comenzar la votación, que no utilizaría ninguno de los cinco diseños.
El alcalde quiso aclarar que él respetaba 'la obra de Mariscal'. 'No es que no me guste Mariscal, es que no me gusta este diseño en concreto porque no representa Madrid', aclaró.
Del Río señaló que el Ayuntamiento se pondrá en contacto con Mariscal 'la semana que viene' para intentar consensuar un nuevo diseño. El profesional catalán manifestó el jueves estar dispuesto a escuchar al municipio. 'En esto del diseño siempre hay que oír al cliente', señaló. Eso sí, añadió que no estaba dispuesto a cambiar nada si el Ayuntamiento venía con argumentos del tipo 'no me gusta'. Al concurso fueron convocados, además de Mariscal, Enric Satué, Alberto Corazón, José Torrent y José María Cruz Novillo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 24 de febrero de 2001