Los 13 episodios de esta serie documental son fruto de 600 horas grabadas por dos equipos que trabajaron simultáneamente a lo largo de seis meses por tierras brasileñas y se internaron en zonas inexploradas de la selva amazónica. Gracias a un minucioso trabajo de localizaciones y a la ayuda de los conservacionistas brasileños de Funai (la Fundación Nacional do Indio), las cámaras pudieron captar por primera vez la vida cotidiana de los zo'e, una de las 55 etnias que aún viven aisladas. Precisamente una de las cuestiones que queda patente en la serie es cómo al vigoroso paraíso natural de la Amazonia lo amenazan estrategias económicas sin escrúpulos.
Amazonia, última llamada es un extenso y profundo recorrido por el gigantesco pulmón verde alimentado por los casi 7.000 kilómetros del río Amazonas. Canal + estrenará la serie la noche del 5 de marzo y emitirá el resto de los capítulos los sábados (a las 15.00) hasta el mes de mayo. TVE la difundirá posteriormente en abierto.
El primer episodio introduce al espectador en la esencia de la selva tropical. El segundo está dedicado a la tribu de los zo'e. El tercero sigue los pasos del defensor de culturas indígenas Sydney Possuelo. Nutren los restantes episodios la impresionante fauna y flora, la riqueza de oro y madera, la biopiratería, el contraste entre la selva y el asfalto, el tráfico de especies silvestres, el esfuerzo de los defensores del medio ambiente y la espectacular naturaleza en la desembocadura del Amazonas.
Aventura, investigación, antropología y llamada de atención para una conciencia ecológica son los ingredientes que han manejado Luis Miguel Domínguez y su equipo, y los han servido con imágenes espectaculares y lenguaje accesible.
'Es un documental con mirada de autor, narrado con un estilo apasionado. Esta serie enseña, entretiene y denuncia', aseguró ayer José Manuel Lorenzo, director general de Canal +, quien manifestó el propósito de la cadena de realizar una difusión en los mercados televisivos internacionales de esta producción, 'comparable en calidad a otras series de firmas prestigiosas como la BBC o National Geographic'. No obstante, reconoció, los presupuestos españoles para los documentales aún no alcanzan las cifras extranjeras. Amazonia requirió una inversión de 250 millones de pesetas, mientras que series de esas productoras pueden alcanzar los 100 millones por episodio.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 24 de febrero de 2001