El juez que investiga el derrumbamiento de Muebles Peralta, donde murieron tres personas y otras 183 resultaron heridas, ha dictado auto de procedimiento abreviado, con el que concluye la instrucción de la causa, e imputa al dueño de la tienda tres posibles homicidios por imprudencia. Fuentes del caso dijeron que el juez también imputa al propietario, Francisco Peralta, una decena de delitos de lesiones graves y varias faltas de lesiones leves.
El juez dirige la acción penal contra el propietario de la empresa, aunque amplía las posibles responsabilidades civiles a sus dos hermanos, que figuran como co-propietarios del negocio. Parte de la tienda se hundió el 3 de febrero de 2000 cuando unas 200 personas acudieron por una oferta de sillones.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 27 de febrero de 2001