El grupo italiano Fiat volvió a lograr beneficios el año pasado en su actividad de venta de coches tras su pacto estratégico con el fabricante norteamericano General Motors. El grupo anunció ayer que la filial Fiat Auto tuvo un beneficio de 7.320 millones de pesetas el año pasado frente a unas pérdidas de 20.132 millones el año anterior. El resultado operativo del grupo fue de 142.260 millones, frente a 131.112 millones el año anterior.
El buen comportamiento de del sector del automóvil se debió en gran parte a las operaciones realizadas en el mercado brasileño y al éxito de ventas de los modelos Fiat Punto y Lancia Lybra.
La facturación de Fiat Auto el pasado año creció un 5% hasta situarse en 4,21 billones de pesetas (25.361 millones de euros), mientras que las ventas de automóviles en todo el mundo se incrementaron un 2,2%, hasta las 2.439.000 unidades.
La cifra de negocio del grupo ascendió a 9,58 billones de pesetas (57.600 millones de euros), un 19,6% por encima del ejercicio anterior. Teniendo en cuenta las variaciones del perímetro de consolidación del grupo, en especial las adquisiciones de Case y Pico, el incremento de la facturación fue del 5%.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 28 de febrero de 2001