Los profesionales estadounidenses de baloncesto y hockey sobre hielo no irán a los Juegos si no aceptan someterse a las mismas normas antidopaje que el resto de los deportistas, de las que hasta ahora estaban exentos. Y siguen reticentes a aceptar tal imposición.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 1 de marzo de 2001