Las máquinas quitanieves amenazan con dejar casi aislados a los 150 vecinos del pequeño municipio vizcaíno de Ubide. Los vehículos de las diputaciones de Álava y Vizcaya volvieron a arrastrar ayer la nieve de la N-240 a su paso por el puerto de Barazar para depositarla en los dos accesos a esta localidad, cuyos residentes no han podido acudir al trabajo en más de una ocasión tras verse atrapados. 'La carretera general queda muy limpia, pero a nosotros nos tapan el paso', explican fuentes municipales.
Por suerte, la nieve se encontraba ayer fresca y el temporal sólo alteró la rutina de los 20 estudiantes que habitan en la localidad.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 1 de marzo de 2001