La Hermandad del Rocío de Huelva peregrinó ayer de forma oficial a la aldea rociera de Almonte para realizar una jornada de convivencia, que estuvo marcada por la ausencia de caballos en cumplimiento de la orden dictada por el Ministerio de Agricultura para prevenir la propagación de la fiebre aftosa. Según dijo el delegado de Agricultura, Juan Manuel López, el encuentro en la aldea almonteña se desarrolló sin incidencias y sin que fuera necesario que se inmovilizara a ningún animal.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 5 de marzo de 2001