Bill Gates, el fundador del gigante informático Microsoft, cree que su casa de 3.400 metros cuadrados, que le costó 109 millones de dólares (que ayer cotizaba a 178,55 pesetas cada uno), se le ha quedado pequeña y quiere construir un dormitorio suplementario. En consecuencia, ha pedido a las autoridades de la ciudad de Medina (Washington) permiso para extender la superficie habitable de la mansión, según documentos del Ayuntamiento. La familia Gates 'ha encontrado errores en la forma en la que la casa ha sido distribuida y la manera en la que entienden utilizar el espacio habitable ha cambiado', indican los documentos. Sin embargo, ni Bill Gates ni sus colaboradores próximos han querido decir si el matrimonio, que ya tiene dos hijos, quiere ampliar su casa porque esperan un tercero. 'El hecho de añadir otro dormitorio no es necesariamente indicación de algún acontecimiento', ha manifestado John Pinette, portavoz de Microsoft. La casa de Bill Gates, situada al lado del lago de Washington, con un aparcamiento en el que caben 28 automóviles, se ha convertido en una atracción turística.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 7 de marzo de 2001