Los comerciantes catalanes han facturado 100.000 millones de pesetas en la temporada de rebajas de invierno -que acabó ayer-, lo que ha supuesto un aumento del 5% de las ventas respecto al año pasado. Las rebajas han ido 'moderadamente' bien y han venido a 'compensar' una temporada 'más floja' que la del año pasado, según el secretario general de la Confederación de Comercio de Cataluña, Miquel Ángel Fraile.
Este año las rebajas se iniciaron con más género que el año anterior (entre el 10% y el 15%), debido al buen tiempo de los primeros meses de la temporada y a la imposibilidad de alcanzar las cifras de ventas de la campaña pasada, según Fraile. Además, 'es normal que después de Navidad el consumo se pare un poco porque hay una cierta saturación', señaló Fraile, quien declaró a Efe que el comercio no ha notado una rebaja del consumo familiar ni 'especial preocupación' por la llegada de una crisis.
Entre el 35% y el 40% de las ventas las han realizado comercios pequeños y medianos (el comercio independiente); entre el 30% y el 35%, cadenas o grupos del sector textil; entre el 10% y el 15%, los grandes almacenes e hipermercados, y el resto ha llegado al consumidor por otros canales, como la venta ambulante. Según Fraile, las tiendas han acabado con las existencias porque los últimos días de rebajas han sido muy fríos 'y al final las ventas han sido mejores de lo que se esperaba', pero ha habido género hasta el último momento. En opinión de Fraile, el comprador de rebajas es un cliente exigente que busca 'productos de mayor calidad a precios más bajos' y cada vez compra menos de manera impulsiva.
El presidente del Agrupament de Botiguers i Comerciants de Catalunya (ABC), Esteve Cantería, también consideró que un porcentaje muy importante de personas compran cuando lo necesitan, sin esperar a las rebajas. Según Cantería, el 50% de la temporada se factura en septiembre, octubre y noviembre, y el resto entre diciembre y enero, mientras que en febrero las ventas son prácticamente nulas porque 'es un mes absurdo; la campaña oficial de rebajas debería acabar antes', afirmó.
El producto estrella de las rebajas sigue siendo el textil, seguido por los zapatos, objetos de regalos y electrodomésticos. El centro de Barcelona recibe anualmente unos 50 millones de personas, de las que el 15% son turistas.
Según el presidente de Barnacentre, Emili Sarrión, las tiendas del centro de Barcelona han tenido un incremento de ventas del 6% respecto al año pasado.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 7 de marzo de 2001