Los padres de los siete menores que supuestamente sufrieron abusos sexuales por parte de un monitor de buceo de Altea han decidido ejercer la acusación particular contra el detenido. En la tarde de ayer mantuvieron una reunión y acordaron contratar los servicios de un abogado de Benidorm especializado en este tipo de casos.
Los menores, por otra parte, comenzarán en breve a recibir tratamiento psicológico, de momento a través de la sanidad pública. Una de las madres señaló a este periódico que 'nadie' les ha ofrecido 'un psicólogo para los niños'.
Luis L, en prisión tras declarar ante el juez encargado del caso, fue detenido el pasado lunes por la Guardia Civil a raíz de una primera denuncia de abusos a un menor que sufrió desgarros anales. El médico forense del Hospital Comarcal de La Vila Joiosa ha remitido ya al juzgado los resultados de las pruebas hechas a este menor. A esta denuncia se sumaron luego otras seis. La Guardia Civil ya ha interrogado a varios de los menores que supuestamente han sufrido los abusos. El detenido, por su parte, negó los cargos en su declaración ante el juez.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 8 de marzo de 2001