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AUTOMOVILISMO

Sainz se juega ante Makinen el triunfo en el Rally de Portugal

El triunfo en el Rally de Portugal se va a decidir hoy en sólo 57 kilómetros, divididos en tres tramos cronometrados. El finlandés Tommi Makinen (Mitsubishi) y Carlos Sainz (Ford) llegan a esta jornada final separados por apenas 13 segundos y después de haber mantenido en la de ayer un duelo intenso entre la niebla, bajo la lluvia y sobre el barro. Las condiciones adversas no impidieron, sin embargo, la presencia excesiva de público en algunos puntos de la ruta.

Sainz buscará su primera victoria de la temporada y el liderato en solitario en el Campeonato del Mundo. El español se ha mostrado muy seguro a lo largo de la complicada competición portuguesa y ha amenazado siempre la primera posición de Makinen. 'Vamos a intentar ganar, pero puede pasar cualquier cosa porque las condiciones son de las peores que he vivido en una carrera', dijo ayer; 'es fácil cometer un error. Y no sólo por el barro y la lluvia. Lo peor es la niebla'.

La igualdad entre el madrileño y Makinen se mantuvo ayer. Empezaron con 17 segundos a favor del finlandés y terminaron con la diferencia reducida a 13 tras cubrir ocho tramos y más de 150 kilómetros. Los dos favoritos se vieron liberados del tercer candidato, el también finlandés Harri Rovanpera (Peugeot), que abandonó por una avería en el radiador de su coche, de manera que la lucha por la victoria quedó reducida a ellos. El tercero en la clasificación, el actual campeón mundial, el igualmente finlandés Marcus Gronholm (Peugeot), se encuentra a casi dos minutos de Sainz.

La solidez y confianza de Sainz quedó clara en el último tramo de ayer, en el que recortó 16 segundos a la renta de casi medio minuto de Makinen para dejar la lucha abierta. El finlandés fue el más rápido en cuatro de las pruebas especiales, mientras que el español, que estuvo a punto de salirse de la pista dos veces, hizo lo propio en dos tramos. Posteriormente, la organización decidió anular por razones de seguridad el último de los programados.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 11 de marzo de 2001