La Audiencia de Barcelona condenó ayer a un total de 62 años de prisión a Adrián Fernández González, vecino de Sant Climent del Llobregat (Baix Llobregat) por exhibirse y abusar y agredir sexualmente a ocho amigos y primos de su hijo, que tenían entre 4 y 12 años de edad. El condenado, de 56 años, deberá también pagar una multa de 1.300.000 pesetas e indemnizaciones a las víctimas por los daños morales causados por un importe de 16 millones de pesetas. El procesado rechazó haber sometido a los niños a diversas prácticas sexuales y atribuyó las denuncias a un complot vecinal y familiar. Pese a la pena impuesta, el tribunal puntualizó en su sentencia que el acusado no pasará en prisión más de 20 años, periodo máximo de encarcelamiento previsto por la ley.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 13 de marzo de 2001