Un tilo de diez metros de alto, plantado por el alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, junto a la estación de tren de Autonomía, se convirtió ayer en el primer árbol de las amplias zonas verdes que se crearán en la Avenida del Ferrocarril. Esta calle tendrá 250 árboles de once especies, 11.000 arbustos y 10.000 plantas en flor cuya plantación y mantenimiento durante dos años costará 195 millones a las arcas públicas. La avenida tendrá también un bidegorri de más de un kilómetro y aparcamientos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 17 de marzo de 2001