La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a un año de cárcel a un gestor que incorporó a su patrimonio dinero recibido de un cliente, algo más de 75.000 pesetas, que correspondían al pago de unas cotizaciones del Régimen Especial de Trabajadores de la Seguridad Social. El gestor debió ingresar ese dinero en el referido organismo oficial, pero se adueñó de él, según la sentencia.
La Audiencia madrileña consideró que el acusado, cuyas iniciales son J. C. J. Z., es responsable de un delito continuado de apropiación indebida. En la sentencia, los jueces afirman que el procesado recibió de P. M. C., su cliente, el importe de unas cotizaciones de la Seguridad Social correspondientes a los meses de mayo, junio y julio de 1997, por un importe total de 75.034 pesetas, y se quedó con el dinero.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 19 de marzo de 2001