La presidenta del Senado, Esperanza Aguirre, destacó ayer la 'deuda de gratitud' que los españoles tienen con los parlamentarios que promulgaron la Constitución de Cádiz de 1812, la primera carta magna española, conocida como La Pepa, que reconoció que la soberanía reside en la nación, poniendo fin al antiguo régimen. Aguirre dijo durante el acto, celebrado ayer en Cádiz, que aquellos parlamentarios 'fueron los primeros en hacer de las Cortes el lugar de representación de la nación'. En la foto, Aguirre (en el centro), la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, y el edil Enrique García, durante el homenaje de ayer.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 20 de marzo de 2001