La Salvaora es una canción zambra que fue un gran éxito en los años de la posguerra española cuando triunfaban en todos los escenarios Manolo Caracol y Lola Flores. Esta semana, en Casa Patas, vuelve a bailarla Jordana Pavón, con la voz al cante de Salvador Román.
Esta Pavón bailaora es nieta de aquel Caracol inolvidable y única de esta generación que continúa la tradición familiar en el flamenco. Su madre, Luisa Ortega, hija de Caracol y ella misma un tiempo intérprete de canción española; su padre, Arturo Pavón, maestro del piano flamenco, hijo del cantaor del mismo nombre, hermano a su vez de la Niña de los Peines y de Tomás Pavón.
Los Ortega y los Pavón, las dos familias probablemente más gloriosas del arte flamenco (y los Ortega, también en los toros). Jordana Pavón actúa acompañada por Román, Ignacio de la Malena y Kimi, al cante; David Jiménez, Juan Jiménez y Cantos, a las guitarras, e Israel, a la percusión. Y en las sesiones de medianoche de viernes y sábado, excepcionalmente, su padre se sentará al piano para acompañarla.
Jordana Pavón. Hoy, jueves, a las 22.30. 2.500 pesetas; viernes y sábado, a las 21.00 y 24.00. 3.000 pesetas. En Casa Patas (Cañizares, 10, metro Antón Martín).
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 22 de marzo de 2001