La reina Margarita de Dinamarca ha podido comprobar estos días que nadie queda libre de críticas ante la ofensiva antitabaco. Fumadora consuetudinaria, Margarita ha sido duramente criticada por el profesor belga Hugo Kesteloots, en la revista británica de medicina The Lancet, por su costumbre de fumar en público. Sostiene el profesor belga que el hecho de que Margarita sea muy apreciada por sus súbditos, y especialmente por las mujeres por su fama de mujer independiente, hace que su mal ejemplo tenga mayor aceptación. Las estadísticas parecen indicar que las mujeres danesas son las más fumadoras de Europa, dándose el caso de que en ese país se registra un alto porcentaje de cáncer de pulmón. El príncipe Henry, que ahora no fuma y que cuando lo hacía tenía que pedirle el dinero para los cigarrillos a Margarita, según las publicaciones enteradas, salió en defensa de su dama. 'Dejen a la gente morir a causa del cigarrillo si así lo desea' , dijo Henry, quien también recordó que la reina madre Ingrid, gran fumadora desde jovencita, falleció el año pasado a la edad de 90 años, lo que, según él, cuestionaría la tesis aceptada sobre la relación entre el cigarrillo y el cáncer.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 24 de marzo de 2001