El equipo de gobierno de Vitoria se ha ratificado en su intención de instalar una planta de tratamiento de residuos junto al Casco Viejo. Tras las críticas vecinales, el alcalde, Alfonso Alonso, ha buscado alternativas, pero suponían un gasto adicional de 200 millones y un retraso en el proyecto de ocho meses.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 24 de marzo de 2001