El fiscal solicitó ayer en la Audiencia de Valencia una pena de cinco años de prisión para Eugenio H. A., de 41 años de edad, acusado de lesionar, amenazar y robar la tarjeta de crédito de su compañera sentimental, María Consuelo S. R. la Nochebuena del año 1999 en su domicilio del barrio valenciano de Natzaret.
Asimismo, el ministerio público le acusa de un delito de tenencia ilícita de armas. De hecho, el acusado reconoció la propiedad de un subfusil semiautomático de procedencia italiana con el que habría amenazado a su compañera. El acusado explicó durante la vista oral que dicha arma la obtuvo con fines defensivos, ya que tiempo atrás su hermano fue apuñalado y estuvo a punto de morir y también él temía por su vida.
Según el relato del fiscal, los hechos por los que Eugenio H. A. fue juzgado ayer ocurrieron la noche del 24 de diciembre de 1999 cuando en el transcurso de una discusión atacó a su compañera con una navaja produciéndole heridas en el abdomen, muslos, rodillas y pierna. El fiscal comentó que un día no precisado del mismo mes de diciembre el acusado disparó con el subfusil a su compañera con ánimo de intimidarla.
Tras la denuncia de los hechos la policia encontró la casa, propiedad de los padres de la víctima, con importantes destrozos y pintadas insultantes por las paredes. El acusado negó los hechos que se le imputan y aseguró que fue su compañera la que se autolesionó durante la discusión. Por su parte, la víctima, y en contra de lo declarado con anterioridad, no pudo precisar qué heridas se hizo ella y cuáles le provocó su pareja. Eugenio H. A. y María Consuelo S. R. empezaron su relación en 1995, un mes después de que él saliera de la prisión donde había cumplido una pena de cuatro años. La relación comenzó a deteriorarse meses antes de la noche en que ocurrieron los hechos.
María Consuelo S. R. explicó en el juicio que la discusión se produjo después de que su compañero sospechara que ella tenía un amante. Entonces comenzó a 'pincharla' con una navaja a la vez que le impedía salir de la habitación.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 27 de marzo de 2001