El cruce de carreteras del puente de la Gleva, en la localidad de les Masies de Voltregà (Osona), es uno de los puntos más conflictivos de la carretera C-17, antes N-152. Las retenciones son habituales los días laborales, pero los colapsos se agravan los fines de semana, especialmente durante el invierno con el aumento de vehículos que acceden a las comarcas de montaña por este recorrido.
El pleno del Ayuntamiento de Les Masies aprobó recientemente por unanimidad pedir a la Diputación el ensanchamiento del puente, una petición que no es nueva, pero que hasta ahora no ha tenido respuesta. Estanis Criballés, alcalde de Les Masies afirmó que 'hasta ahora el punto conflictivo de la C-17 eran los semáforos de Sant Quirze de Besora, pero ahora ya empezamos a ser nosotros'.
El motivo principal que ha llevado al consistorio a solicitar de nuevo la ampliación es el inicio de las obras de una rotonda a la altura de este cruce. La rotonda mejorará el acceso a los núcleos de la Gleva, Sant Hipòlit de Voltregà y Manlleu, y, según Criballés, la ejecución de las dos obras sería la mejor solución a los problemas de tráfico. La petición de ampliación del puente también esta motivada por la antigüedad y las malas condiciones en que se encuentra la infraestructura.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 28 de marzo de 2001