El Milan alega que la presunta falsedad contable de sus balances entre 1991 y 1997 de la que se le acusa -para poder participar en el campeonato italiano, que ganó cuatro veces en ese periodo- se debe a que los fiscales han mezclado los datos. Según aduce, 'no ha cedido nunca derechos de imagen de cualquiera, sino que ha realizado una normal operación comercial, con transparencia y teniendo como objeto el uso de su propia marca'. El 3 de mayo se celebrará la audiencia preliminar.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 28 de marzo de 2001